Ermita del Espíritu Santo
Está situada en el comienzo de la calle que lleva su nombre.
Es una obra del siglo XVII, de planta rectangular, cúpula octogonal sobre la capilla mayor y espadaña.
Bajo el ojo de buey que existe actualmente en su fachada debió estar una entrada que hoy se encuentra cegada.
La cabecera posee un altar con la imagen de la Virgen María, todo ello bajo cúpula esférica con tres linternas. Hoy día se utiliza como almacén.