El Ayuntamiento de Jerez y la empresa promotora, acordaban recuperar este festejo aplazado en mayo por la lluvia.
La plaza de toros de Jerez de los Caballeros, ha acogido este sábado la novillada mixta con picadores cuya celebración estaba prevista para el pasado mes de mayo, durante el desarrollo del XXVII Salón del Jamón Ibérico y fue suspendida debido al mal tiempo. Con algo menos de media plaza, y en una jornada muy calurosa, los aficionados jerezanos disfrutaron de una exitosa tarde de toros en la que se lidiaron dos toros de Arucci para el rejoneador Andres Romero y cuatro de Cayetano Muñoz para los novilleros Emilio Martín y Fernando Flores.
El festejo comenzó con un minuto de silencio en memoria del torero Victor Barrio, fallecido la pasada semana en la plaza de toros de Teruel, tras una grave cogida. Los toreros le recordaron emocionados, brindando al cielo sus actuaciones.
El rejoneador Andrés Romero que fue el encargado de abrir el festejo, destacó en el primero toreando a dos pistas con mucha maestría, arriesgando al colocarle tres banderillas cortas y consiguiendo la primera oreja. La entrega y el valor del onubense en el cuarto, un novillo rajado pero con peligro, le valió las dos orejas.
Emilio Martín y Fernando Flores, los dos únicos novilleros que han indultado un astado en el coso jerezano, se enfrentaron mamo a mano con menor suerte para el primero, que en el segundo de la tarde,un precioso ejemplar de Cayetano Muñoz con hechuras de toro, consiguió naturales de calidad llegando a tener la oreja en sus manos aunque no la alcanzó, recibiendo finalmente la ovación del público. Si consiguió las dos orejas en el quinto en el que estuvo acertado con el estoque.
Fernando Flores fue el triunfador absoluto cortando cuatro orejas, con una actuación muy asentada y madura. El novillero de Salvatierra, se lució a la verónica con el tercero de Cayetano Muñozcon, con el que estuvo inteligente dándole los tiempos y distancias que necesitaba el novillo. También se lució en el sexto, muy firme a pesar de que el toro no se lo puso fácil.
